El villano de la última película de James Bond menciona que no puede morir a manos del servicio secreto inglés, pues resulta más valioso por la información que posee. Bond le replica que en efecto, que desde la 'perspectiva global' aquella afirmación es válida. Al pasar unos días en casa de mis padres, me deshice de muchos periódicos que guardaba desde hacía años, entre ellos algunos ejemplares del suplemento dominical de la Jornada, las famosas Histerietas, así como de la sección cultural. Encontré una nota de 1998 escrita por Neif Yehya, en su columna La Jornada Virtual, donde desmitifica la creencia en las bondades democráticas de Internet; aquellos que tienen la información, no necesariamente tienen la verdad.
El exceso de información en la red obliga a varias páginas a llevar un estricto control editorial para asegurar su credibilidad; en el trabajo, nuestra broma recurrente es acerca de las fuentes de información, especialmente textos que suelen repetirse en varias páginas que encontramos; quienes las editan, aplican un copy/paste descarado de Wikipedia o el discutible 'Rincón del vago'. Aun no pierdo la fe en las bibliotecas, y como parte del trabajo suelo visitar quincenalmente una de ellas, ya sea la biblioteca central de la UNAM, la Ibero o la Biblioteca Nacional, una actividad que hoy suena bastante 'luddita'. Creo que los antiguos galos no desarrollaron un sistema de escritura pues confiaban más en la memoria, y en general, en la antigüedad la memoria o el 'recuerdo' era muy apreciada; los primeros 'escritores', lo único que hacían era dictar sus pensamientos a sus esclavos especializados; escribir era un trabajo menor.
Tiré a la basura, no sin antes recortar algunas notas que me interesaban, muchos periódicos y revistas, algunos de hace poco más de diez años. Me trajeron recuerdos, momentos y reflexión sobre todo lo que me ha sucedido. El balance me deprimió un poco, pero al final me alegró deshacerme de ellos. Con ellos se fueron, además, varios casettes VHS.
Todo es cuestión de formatos.
Ayer, durante la sesión anual de The Empire Strikes Back, un chiste nerd sobre la utilidad de los mercenarios que darán caza a Han Solo y su motley crew rebelde, princesa Lea incluida, es que ellos tienen una auténtica perspectiva global de las cosas y poseen más información que cualquiera de las fuerzas rebeldes o imperiales. Bobba Fett sólo pregunta sobre su cuota, en el fondo ya sabe que Solo y Chewbacca están perdidos.
